Llega el tan esperado día y para todos será un cambio importante, la llegada implica un nuevo mundo para el cachorro y nuevos cuidados para la familia.
Amar a tu perro es cuidar de él, ejercitarlo, estar con él en las buenas y en las malas, y jamás abandonarlo. Aunque cumplas con los cuidados básicos, existen diversas maneras y detalles para mostrarle a tu can lo importante que es para ti y que lo amas incondicionalmente.
Bríndale tu tiempo
Hay algo simple pero fundamental que tu perro necesita: tu tiempo. Aunque estés cansado y no puedas hacer nada con tu perro, le puedes brindar tu compañía. Lo único que requiere es que estés con él. A veces con que estés cerca es suficiente para él y para ti.
Acarícialo
Si tu perro es como la mayoría de los canes, se tumbará a tu lado para que lo acaricies. Acariciar un perro tiene muchos poderes curativos, te puede aliviar estrés y tendrás a tu lado una masa peluda radiando de felicidad.
Llévalo a pasear
Un perro necesita varios paseos diarios. Esto le permite hacer ejercicio y conocer su entorno fuera del hogar. Los paseos deben ser largos y placenteros. Sácalo con la correa puesta y aprende a pasearlo de manera positiva.
Juega con él
Parte de la rutina diaria de tu perro es jugar. Hay distintas maneras de jugar. Algunas son iniciadas por él (e.g. cuando tu perro se da la vuelta, te mira y empieza a correr, invitándote a que te unas a él); o por ti (e.g. cuando tiras una pelota y él te la trae). Incluso a los perros mayores les encanta jugar.
Preséntale tu mundo
Tu perro necesita socialización. Exponlo a todo tipo de personas, lugares, mascotas y sonidos. Todas las situaciones deben ser positivas. No sólo tendrás un perro equilibrado, que no le tiene miedo a sus alrededores; también pasarás tiempo con él.
Llévalo al parque de perros
Si tienes un perro adulto esterilizado, que además se porta bien, un parque es ideal. Deja los juguetes y las delicias en casa y supervisa a tu perro en el parque, donde puede jugar libre de la correa. Prepara a tu cachorro para que vaya al parque en el futuro a través de la socialización. Preséntale otros canes en tu vecindario y a las mascotas de tus amigos.
Entrénalo
Esto incluye socializarlo, hacer ejercicio con él y enseñarle obediencia básica. Puede ser algo tan simple como enseñarle un truco. Utiliza el reforzamiento positivo y abstente de castigos o gritos. De esta forma aprenderá con facilidad y podrás modificar el comportamiento que no desees sin estrés para ninguno de ustedes. Tu perro se merece premios por portarse bien.
¡Sorpréndelo con un premio!
¿Qué sorprende a tu perro? ¿Un cambio de comida? ¿Un trocito de jamón como recompensa a un Sit que lleva años haciendo? Si no sabes lo que sorprende a tu cánido es hora que te enteres. Averígualo. Puede ser un paseo inesperado o acceso al exterior, una delicia o hasta que lo rasques.